lunes, 9 de febrero de 2009

No se cae de la mesa

El sensor que lleva en el extremo del parachoques tiene en cuenta la diferencia de oscuridad que hay entre la superficie de la mesa y la del espacio que hay hasta el suelo, lo que requiere ajustar este valor entre un máximo y un mínimo.

Cuando el robot llega al borde de la mesa y el sensor detecta la oscuridad, los motores se paran, dan marcha atrás, uno de ellos se mueve mientras el otro permanece parado y nuevamente arrancan los dos.

Podría estar así indefinidamente o establecer un número limitado de ciclos.